Si te crees todo lo que lees, mejor no leas

Vivimos tiempos de exceso informativo. Las palabras vuelan más rápido que los hechos, y las opiniones muchas veces se confunden con verdades absolutas.

Estos días, con Mercurio (el planeta de la comunicación, el pensamiento y los mensajes) tan activo en el cielo, y Júpiter (el gran amplificador, el sabio y también el exagerado) metiendo su lupa sobre todo lo que decimos y creemos, es fácil caer en la trampa de “si lo leí, debe ser cierto”.

Pero no todo lo que se lee, se escucha o se comunica es verdad. Y, paradójicamente, la verdad no siempre se comunica tan fácilmente.

Mercurio quiere entender. Júpiter quiere creer. Uno pregunta, el otro afirma. Uno duda, el otro pontifica. Y cuando estos dos se activan con fuerza en el cielo, la mente se acelera, la información se multiplica y las ideas se expanden como si fueran certezas... aunque no lo sean.

Este tránsito es perfecto para hacernos una pregunta esencial:

¿Desde qué lugar estoy interpretando lo que leo?

¿Lo leo con criterio? ¿Con pensamiento crítico? ¿Con apertura, pero también con filtro? ¿O lo leo para confirmar lo que ya quiero creer?

Hoy más que nunca, esta danza de Mercurio y Júpiter nos invita a cuestionar, investigar, contrastar, pensar y sentir antes de absorber cualquier información como verdad absoluta. Porque la mente también se alimenta, y no todo lo que comemos nos hace bien.

En lo alto del cielo, Mercurio puede ser un mensajero brillante, veloz, curioso, y Júpiter puede ser un faro de sabiduría, de filosofía, de expansión de conciencia. Pero también pueden ser los responsables de grandes confusiones si no estamos atentos.

Así que, si te creés todo lo que leés, mejor no leas. Leé, sí, pero con el alma despierta. Con la brújula interna calibrada y, principalmente, con criterio propio.

No te creas todo. Pero tampoco dejes de buscar.

Porque el saber no está en los libros, ni en los posts, ni en los horóscopos.

El saber verdadero empieza cuando te animás a preguntarte:

¿Esto que estoy leyendo… resuena conmigo?

¿Desde qué lugar fue escrito?

¿A quién le doy el poder de influenciar mi percepción?

Mercurio y Júpiter nos regalan estos días un escenario ideal para expandir la mente… pero también para educarla, disciplinarla y afinarla.

Si sentís que necesitás una mirada más profunda, personalizada, que te ayude a ordenar lo que estás viviendo y lo que estás pensando, el cielo de tu carta siempre guarda claves precisas para vos. A veces, una conversación con tu mapa natal —o con tu revolución solar— puede darte más respuestas que mil lecturas sueltas.

Que la información no te aturda.

Que la sabiduría te inspire.

Y que el pensamiento propio nunca deje de ser tu mayor guía. Porque el pensamiento apropiado es el apropiado.

📅La agenda de Junio ya está completándose pero ya abrí la agenda de Julio, los veo en nuestros encuentros personales y, especialmente, en sus Revoluciones Solares para comenzar el año juntos!

Con todo mi criterio,

Maira Antonela Camerano